
MENDITTOROSA
Mendittorosa odori d'anima: las expresiones en forma de fragancia de un sueño inscrito profundamente en el corazón de su fundadora, Stefania Squeglia.
Es durante un viaje a la isla de Stromboli (Italia) en 2011 que Stefania recordó: cuando era una niña pequeña, ella realizaba experimentos olfativos llenando frascos de vidrio con pétalos, agua y fragancias femeninas. Escondía los frascos en la oscuridad y esperaba para descubrir más tarde los resultados de sus combinaciones: las “fragancias” habían cambiado.
Despertado por estos recuerdos y por una vocación más profunda, Stefania creó la Casa de perfume. El sueño olvidado, finalmente renació; el juego ingenuo se convirtió en un objetivo ahora encarnado en nuevas botellas: las de Mendittorosa odori d'anima (olores del alma).